Close

Commentarios, #11

Por Dr. Francisco Marcucci

Amigo lector es para mí una agradable satisfacción estar nuevamente en tu lectura y poder compartir a mi entender parte de lo que ha sido la evolución en la crianza de la raza peruana de paso, cuando me inicie como criador de esta raza hace ya varias décadas. el caballo peruano de paso estaba pasando por un proceso normal de selección, llevado a cabo por los criadores de esa época en el Perú.

En mi primer viaje a Perú en 1982 tuve la oportunidad de ser atendido por el ingeniero Manuel Mazzi Casas, mi maestro y amigo. Fuimos a visitar varios criaderos importantes de la época, entre ellos el criadero del señor José Antonio Onrubia, el del señor José Antonio Otero, el Criadero Sierra Morena de los señores Bedolla, señor Jose Musante H., el del señor José Risso Matellini, el del señor Alfredo Elías de Ica, el del señor Hugo Nieto, el del señor Nazario Villafuerte, el del señor Fernando Pescheira y algunos otros más que se escapan de mi memoria.

De esta manera pude conocer muchos ejemplares de esa época que me parecieron individuos que diferían en formas, estilos, colores y andares. Reconociendo que a pesar de esta diversidad existían animales bellos y de muy buenos andares. Habiendo podido percibir que hacía falta una adecuada selección de los ejemplares que pudiera llegar a establecer una uniformidad en colores, formato y función.

Por fortuna esta necesidad de selección ya habría comenzado a darse por los señores jueces de esa época, Don Antonio Graña y Don Fernando Graña, quienes establecieron las directrices para una mejor uniformidad de formato y función. También trataron de establecer colores definidos, castigando los entre pelos y los manchados disminuyendo de esta manera los excesos de blanco en caballos.

Como podemos entender esto no fue una tarea fácil ni agradable, de alguna manera los criadores y la asociación nacional percibieron la necesidad de criar un ente colegiado de jueces que continuaran con la selección y clasificación de los ejemplares.

Dentro del grupo de criadores se encontraban las personas más idóneas para formar este ente. Durante mis siguientes visitas a Perú pude observar la extraordinaria labor que realizaba este grupo de criadores convertidos en jueces. Ellos establecieron las bases para lograr en el tiempo los objetivos que hoy en día se han obtenido.

En la actualidad la asociación nacional ha mantenido dentro de su comité de jueces a personas que tienen los conocimientos necesarios para tan importante labor y además han formado a nuevos jueces bajo sistemas más profesionales para poder realizar adecuadamente y sustentar sus juzgamientos.

En mi opinión en la época actual los caballos peruanos que se presentan en los diferentes eventos de clasificación realmente son ejemplares de una alta calidad tanto en formato como en función, habiendo alcanzado la raza a una impresionante uniformidad como criador de esta raza, me siento satisfecho de que se hayan alcanzado los objetivos deseados y que se continúen con el propósito de superarlas.

Todas estas cualidades se pueden observar por el alto grado de competitividad que poseen los ejemplares que se presentan en los concursos.

Realmente puedo comentarles sin lugar a equivocarme que nuestro caballo es una obra de arte natural