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UN AMIGO LLAMADO SUEGRO

Por Belisario de las Casas D’Onofrio y José Roberto Risso de las Casas

Es difícil no pensar en lo tarde que es escribir líneas para hablar y honrar nuestra experiencia con una persona tan extraordinaria como fue, es y por siempre será José Luis Gagliardi Wakeham, nuestro suegro. Que no sea más tarde, unas cuantas líneas jamás serán suficientes para explicar lo mucho que significaba él para su familia, sus amigos y por supuesto su afición, pero sí serán muy merecidas.

Pepe Lucho comenzó su cría de nuestro caballo hace aproximadamente 22 años de la mano de nombres muy importantes en nuestro mundo. Los responsables de iniciar a nuestro suegro en un bello romance, como el que tuvo por nuestra afición, salen a la luz. Fueron Don Alfredo Elías Vargas y el Dr. José Miguel Morales los responsables de traer a nuestra querida ANCPCPP a quien se forjaría como un espléndido aficionado y criador; cuando el Fundo Cuatro Vientos no era más que su sueño más adorado comenzando a volverse una realidad.

Su primo y mejor amigo, el Dr. José Miguel Morales Dasso, le regaló a Pepe Lucho la yegua MSCRL Bello Sueño. Esta bella yegua le produjo ejemplares adorados por él como fueron JLGW Ancara y JLGW Bello Sol. Por otro lado, un gran criador, gran Señor y mejor amigo también, Don Alfredo Elías Vargas, le obsequia a Pepe Lucho un animal importantísimo en su criadero, AEV Astria,  gran madre reproductora que le produjera animales como JLGW Ainoha y JLGW Capricho. Aparte de este gran lazo de aficionados, en el año 1997 Pepe Lucho se compra al capón LV Céfiro de bozal quien fuera Campeón de Campeones en los años 1998 y 2002. Posteriormente en el año 2004, con mucha visión ya que era sólo una potranca, adquiere del Sr. Luis Alfredo Malatesta la yegua que posteriormente sería la dueña de sus sueños, romances y ambiciones dentro del mundo de nuestro CPP, LAM Loa.

LAM Loa merece un párrafo aparte para hablar de ella ya que fue para Pepe Lucho el animal que lo hacía vibrar. Una yegua que prácticamente nunca conoció la derrota. Desde las categorías al cabestro donde participó comenzó una senda ganadora que no se detendría hasta el año 2012 cuando conducida por su yerno, se convirtió en Campeona de Campeonas del Concurso Nacional. Todos los que hemos estado cerca de él recordaremos ese día porque la manera como Pepe Lucho te transmitía su felicidad era incomparable (pero a eso entraremos luego en el presente artículo). LAM Loa, le produjo y le sigue produciendo excepcionales ejemplares ganadores de Concursos Nacionales como son JLGW Loa, JLGW Primavera, JRR Agradecida entre muchos otros que estamos seguros llegarán. LAM Loa no solo alcanzó el título máximo en cancha, sino también, este último Nacional dejó su huella como Mejor Vientre. Estamos seguros que bajo su mirada siempre llorosa desde el cielo, aplaudirá las rosetas y pechopetrales por venir gracias a esa gran yegua madre que él tanto adora y que hoy su familia con muchísima responsabilidad y afición mantienen en cría.

En el año 2014, nuestro suegro nos da una orden. Nos pide que por favor le recibamos un vientre de LAM Loa de regalo para cada uno. Sin poder hablar mucho del por qué nos quería dar este sentimentalmente valiosísimo regalo, lo recibimos con mucho cariño y afición. Pepe Lucho no podía comunicarse sin poner el corazón en cada palabra y manifestar la alegría que le daría que sus dos yernos aficionados a esta raza mantengan en su corral un producto de su reina madre. Fue un acto de desprendimiento que siempre discutimos con él porque nos parecía demasiado. LAM Loa no había terminado de dar una cantidad considerable de crías y pensábamos que Pepe Lucho perdía el tiempo y no aprovechaba su yegua. Ahí es donde viene la orden de, “sácale porque yo digo, yo quiero y punto”. Producto de este lindo desprendimiento nacieron JRR Agradecida y BCD Codiciada ambas dos potrancas de un altísimo nivel pero mayor el significado emocional que tiene para nosotros.

Su cría despertaba una llama interna en él. Los ojos se le abrían, se le humedecían, la sonrisa se le dibujaba cuando veía sus crías pequeñas. Ver sus caballos ya logrados era algo que adoraba pero llenarse de ilusión con su potrancada, lo revivía. Veía sus caballos en persona, regresaba a su escritorio y hacía un papelito donde ponía a trabajar su inventiva en pro de nombres para su crías. Luego, veía los videos y veía si el nombre pensado le caía bien. Al llegar el momento duro en que Pepe Lucho tuvo que pasar varios días en el Hospital, su elíxir, su medicina máxima era que le eseñen videos de las crías crecidas y las recién nacidas. Pepe levantaba la mano y te pedía ver fotos y videos, te levantaba el pulgar, te agarraba la mano y sentías que extrañaba muchísimo ver sus caballos y pese a estar en el hospital la llama de la ilusión por sus caballos y su cría sólo se hacía más fuerte.

Un romántico del caballo, amante de su cría y un soñador para nuestra ANCPCPP. Pepe Lucho no creía en un caballo suyo que no hablara de él. Un caballo no podía ser menos que un espejo de su afición y siempre se esmeró por darle a sus caballos lo mejor. No escatimaba en que sus caballos estén bien porque los veía como su estandarte y cual gallo, en la cancha defendían los colores de Cuatro Vientos con el corazón. Si bien el caballo podría no ganar, su caballo nunca pasaría desapercibido, siempre sería elogiado y lo enorgullecía. Esa era una premisa básica para para él.

Para hablar de su relación con la ACNCPCPP no podemos dejar de recordar las reiteradas llamadas y conversaciones de mínimo una hora, para hablar de la ANCPCPP. Siempre preocupado por la problemática en nuestra institución pero más que nada en su futuro. Pepe Lucho nos debe haber consultado por nuestra opinión mínimo 5 veces acerca si debería tratar de ser Presidente de la ANCPCPP y esa apertura de conversaciones eran largas porque Pepe Lucho era feliz soñando despierto comentándote qué era lo que él quería hacer de nuestra institución. Desde su postulación en el año 2010, nuestro suegro se apoyó totalmente en los “jóvenes” y siempre quiso rodearse de ellos dado que creía por su gran bagaje de conocimientos corporativos que para generar cambios, se necesita espíritu y si ese espíritu llevaba juventud, la combinación era imbatible. Si bien siempre le dijimos a Pepe Lucho que su vida tenía que ser de disfrute, afición y alegría con sus caballos, nunca desestimó llevar el varayoc contra todo consejo de sus amigos, familiares e incluso doctores. La ANCPCPP siempre tuvo un espacio importantísimo en su mente y corazón.

Llega el momento duro, el de hablar de él. Hablar de la persona, del amigo, del consocio, del profesional, del suegro, del esposo, del padre; todos personajes y papeles que jugó en nuestro mundo de manera espléndida. No hay duda cuando uno piensa en Pepe que cuando se hace el 100% de las cosas con el corazón, se cala en la vida de todo aquel que se cruza por tu camino. Ese era nuestro suegro; una persona con más sentimientos que actitudes, con más corazón que intereses.

Nosotros hicimos el ejercicio de flajelarnos preguntándonos: ¿cuándo fue la última vez que caminando en Mamacona te encontraste a Pepe Lucho en el camino y al verte se paraba; bien ensombrerado, abrigado y bastón en mano te quedaba mirando (con la cabeza andando marcando 100,000 revoluciones por segundo) diseñando lo que te diría para arrancarte la sonrisa más sincera y cariñosa que te puedes dibujar en la cara? Cuando hoy recordamos a Pepe Lucho, es imposible no tener pena pero también es imposible no sonreír. Es que nuestro suegro, ha tenido anécdotas con todos, ha tenido risas con todos y en todos y cada uno de nosotros, estamos seguros que ha calado.

Con una fascinación por hacer a la gente sonreír, poniendo “chapas”, asustando, bromeando, Pepe Lucho siempre tenía algo bueno para ti. Siendo esto muy importante en quien lo conoció, también sabrá reconocer que en nuestro suegro siempre tenías dos oídos y una mente que te querían escuchar y ayudar. No existía día en el año en donde Pepe Lucho no tenía tiempo para uno, no sólo para aconsejar sino para sentirse orgulloso de tus logros, saber de tu vida y agradecer a Dios de lo bien que te podía estar yendo. Las palabras familia y amigo para él nunca tuvo límite ni mucho menos tu vo límite el cariño y devoción hacia ambas.

Es difícil poner punto final a una oportunidad de rendirle un merecido homenaje a quien fue nuestro segundo padre, un gran amigo y aficionado. Como dijimos al comienzo del presente artículo, jamás se podrán plasmar suficientes palabras en un papel que rindan el verdadero reconocimiento que merecía tan linda persona y amigo. Cada uno “lleva la procesión por dentro” y sabrá recordar su vida alrededor de nuestro suegro luego de leer estas breves y humildes palabras de dos personas que lo adoran, que están orgullosos de ser parte de su familia y lo extrañan a morir.

Pepe Lucho, tu familia, tus amigos y tus caballos te vamos a recordar siempre y te vamos a extrañar MUCHISIMO.